El último ganador del Gran Premio de Mónaco, el alemán Sebastian Vettel y su compañero de equipo Mark Webber, destacan el alto nivel de dificultad que tiene el trazado en las calles del Principado. Esta temporada el australiano completará su décima participación en Monte Carlo.

Sebastian Vettel:
"Es especial correr en Mónaco. Es estrecho y no hay margen para el error. Es duro y como se trata de un circuito callejero, la superficie de la pista no es uniforme, razón por la cual se sacude el auto y no hay espacio para cometer errores. Hay que presionarse uno mismo y al auto para ser rápido, más que en otras pistas. Se puede sentir el roce de los muros, una sensación increíble. Hay que estar totalmente enfocado. Ganar en Mónaco es algo especial".

Mark Webber:
"Mónaco es una pista realmente especial. Es un circuito antiguo en el sentido que no ha cambiado mucho respecto a su trazado original. Fue un poco fácil cuando competí allí por primera vez hace 10 años, pero aún es una prueba para el piloto contra la pista y con el auto. Se está compitiendo contra los rivales, pero no siempre se siente eso, ya que la pista exige cada vez más. Si hay distracciones, puede ocurrir un accidente, así que es un circuito muy exigente mentalmente. Físicamente es sencillo, pero hay que ser muy disciplinado con los retos que hay en Mónaco".